El Observatorio ha recibido con preocupación información de fuentes fidedignas sobre la detención arbitraria y posterior puesta en libertad de la Sra. Miriam Elvir y del Sr. Cesario Padilla, ambos periodistas y pertenecientes al Comité por la Libre Expresión (C-Libre)[1], donde son responsables de las alertas de agresiones a periodistas y del acompañamiento a profesionales de la comunicación víctimas de violencia. Estas detenciones ponen de manifiesto una afectación directa a la libertad de expresión en el país.
Según la información recibida, el 2 de noviembre de 2020, en el Día Internacional para poner fin a la impunidad de los crímenes contra periodistas[2], aproximadamente a las tres de la tarde, la Sra. Miriam Elvir fue detenida por la Policía Nacional de Honduras en un retén policial a la entrada de la Colonia La Esperanza en la ciudad de Tegucigalpa por supuestas “faltas a la autoridad”, “injurias” y “calumnias contra los agentes de policía”. Antes de ser detenida, la Sra. Elvir se había identificado como periodista y había pedido a los agentes de policía información acerca de la instalación del retén policial.
Minutos más tarde, el Sr. Padilla, quien estaba documentando la detención de la Sra. Elvir, fue detenido mediante un uso excesivo de la fuerza, incluidos golpes en la cara.
De acuerdo con la misma información, una vez en el vehículo policial, ambos periodistas fueron agredidos verbalmente por los agentes de la Policía Nacional de Honduras, quienes les dijeron que “a ellos [a la Sra. Elvir y al Sr. Padilla] lo que les gustaba era hacer ‘show’”. Los periodistas manifestaron que a lo largo de su detención[3], fueron exhibidos públicamente por varios puntos de la ciudad, siendo tildados de “criminales” y otros insultos, hasta que fueron finalmente detenidos en el Distrito 18, cuarta estación de Comayagüela en el Barrio Belén.
La Sra. Elvir y el Sr. Padilla permanecieron detenidos durante ocho horas, a lo largo de las cuales fueron trasladados a cuatro estaciones de policía diferentes sin ser informados en ningún caso del lugar adónde los llevaban detenidos.
Aproximadamente a las once de la noche del mismo día, ambos periodistas fueron puestos en libertad sin cargos tras ser obligados a firmar un acta de conciliación.
El Observatorio condena enérgicamente las agresiones y la detención arbitraria de la Sra. Elvir y el Sr. Padilla y destaca que el Sr. Padilla es beneficiario de medidas de protección del Mecanismo Nacional de Protección para Periodistas, Comunicadores Sociales, Operadores de Justicia y Defensores de Derechos Humanos.
El Observatorio subraya, asimismo, que la detención arbitraria de ambos periodistas se enmarca en un contexto de violencia generalizada, incluidos el hostigamiento, los ataques sistemáticos en contra de personas defensoras de derechos humanos y periodistas en Honduras y el uso indebido del derecho penal, constituyendo graves violaciones al derecho a la vida e integridad personal. En ese sentido, el Observatorio advierte que la detención arbitraria de la Sra. Elvir y el Sr. Padilla no corresponde a un hecho aislado, sino que se trata de hechos sistemáticos, en donde se han observado patrones de violencia contra los periodistas y comunicadores sociales que ejercen un periodismo de rendición de cuentas respecto de la actividad pública[4].
Por todo lo anterior, el Observatorio urge a las autoridades hondureñas a investigar de manera inmediata, exhaustiva e imparcial las agresiones físicas y verbales arriba mencionadas y a poner fin a todo tipo de hostigamiento en contra del Sr. Padilla y de la Sra. Elvir, así como contra los periodistas y personas defensoras de derechos humanos en Honduras.
How You Can Help
Por favor, escriban a las autoridades de Honduras urgiéndolas a:
i. Adoptar de manera inmediata todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad y la integridad física y psicológica de la Sra. Miriam Elvir y del Sr. Cesario Padilla y, en general, de todas las personas defensoras de los derechos humanos y periodistas en Honduras;
ii. Iniciar una investigación inmediata exhaustiva, independiente e imparcial en torno alas alegaciones de uso excesivo de la fuerza policial, con el fin de identificar a los responsables, llevarlos ante un tribunal competente, independientee imparcial, y aplicarles las sanciones penales, y/o administrativas previstas por la ley;
iii. Poner fin a todo tipo actos de hostigamiento en contra de la Sra. Miriam Elvir y el Sr. Cesario Padilla,así como de todos los periodistas y personas defensoras de los derechos humanos en el país;
iv. Implementar políticas de reconocimiento, incluyendo el reconocimiento público por parte del Presidente de la República y otros altos funcionarios, de la importancia de la legítima labor llevada a cabo por las personas defensoras de los derechos humanos y periodistas en Honduras;
v. Asegurar la aplicación de lo dispuesto por la Declaración sobre los Defensores de los Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea General de la ONU el 9 de diciembre de 1998, en particular en lo referente al artículo 1, 5.a y 12.2;
vi. De manera general, garantizar el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales en todo el país, de conformidad con las normas internacionales de derechos humanos ratificadas por Honduras.